Una decena de investigadores analizarán en el campus de Sant Joan d’Alacant de la UMH los últimos avances en dolor e inflamación
29 septiembre 2022
El Instituto de Neurociencias, centro mixto de la Universidad Miguel Hernández (UMH) y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha organizado el simposio ‘Neurobiología del Dolor y la Inflamación’, que se celebrará mañana viernes, 30 de septiembre. Este encuentro se celebrará a partir de las 09:00 horas en el Salón de Actos del Instituto, ubicado en el edificio Santiago Ramón y Cajal del campus de Sant Joan d’Alacant y reunirá a una decena de expertos de varios países que debatirán sobre los mecanismos del dolor y la inflamación, dos procesos de alta prevalencia en todos los países.
En concreto, el simposio está organizado por los investigadores del Instituto de Neurociencias Elvira de la Peña, Ana Gomis, Salvador Sala, Francisco Taberner y Félix Viana, pertenecientes al programa científico del Instituto ‘Neurobiología del dolor y la inflamación’, que lidera por el investigador Viana.
Entre los ponentes, destaca Gary Lewin, del centro de Medicina Molecular Max Delbrück, de Berlín (Alemania). El profesor Lewin es una figura reconocida en el campo de la neurobiología del dolor y ha realizado contribuciones fundamentales a la comprensión de los mecanismos moleculares, responsables de la detección de las señales táctiles y térmicas en las terminaciones sensoriales cutáneas, así como el papel de los factores neurotróficos en el desarrollo de los nociceptores. Su conferencia se titula ‘Canales iónicos y sus anclajes para el sentido del tacto’. Además, Lewin se ha centrado en desentrañar la biología de la rata topo desnuda (Heterocephalus glaber), como excelente modelo para el estudio del dolor, al que este animal es inmune. La rata topo es un roedor excavador nativo de Kenia y Sudáfrica, con una aptitud física y una longevidad excepcionales.
Otra de las ponentes es Franziska Denk, del King`s College de Londres (Reino Unido), quien estudia el sistema nervioso periférico y su participación en el dolor crónico. Su grupo estudia por qué el dolor persiste durante largos períodos de tiempo y la conferencia que impartirá se titula ‘Una perspectiva neuroinmunológica del dolor neuropático crónico: ¿y si los nervios no son los culpables?’. El dolor crónico es una condición común que induce cambios bien caracterizados en las neuronas y la microglía, el sistema inmune del cerebro. Para Franziska Denk, una pregunta importante sin respuesta es averiguar por qué estos cambios persisten mucho tiempo después de que haya sanado la lesión desencadenante. Además, la investigadora sugiere que algunas de las consecuencias más duraderas de la lesión nerviosa como el dolor pueden estar ocultas en el epigenoma; un conjunto de marcas químicas en el ADN que se adquieren a lo largo de la vida. Estas marcas epigenéticas adquiridas pueden variar la expresión del ADN sin cambiar su secuencia y producir efectos adversos como diversas enfermedades.
En España, el 32% de la población adulta padece algún tipo de dolor y el 11% lo padece de manera crónica; es decir, sufre al menos un cuadro de dolor que dura más de seis meses, según datos de la Sociedad Española de Neurología. El dolor es un mecanismo de defensa ante el daño en los tejidos, por lo que juega un papel biológico fundamental. Sin embargo, el dolor crónico se asocia a un gran número de enfermedades que impactan de manera muy negativa en el bienestar físico y emocional. Desgraciadamente, los tratamientos para estas patologías son poco eficaces o tienen graves efectos secundarios, por lo que la investigación es esencial.
Este programa científico, coordinado por el investigador Félix Viana, agrupa a investigadores interesados en descifrar los mecanismos del dolor, el picor y la inflamación. Abordan preguntas a distintos niveles, desde la función de los receptores para irritantes químicos, el tacto y la temperatura, la caracterización de los circuitos neuronales para el dolor y el picor, hasta estudios psicofísicos del dolor y el malestar ocular.
El objetivo de este programa es identificar los mecanismos que participan en la cronificación del dolor y el picor, incluyendo el papel de las células no neurales como la glía (conjunto de células del sistema nervioso que no son neuronas), desarrollar nuevas herramientas para la disección de los circuitos del dolor y, por último, descubrir y caracterizar nuevos fármacos para el tratamiento del dolor y el picor crónico.
Consultar en el programa.