La Facultad de Farmacia de la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH) celebra esta semana en el campus de Sant Joan d’Alacant la tercera prueba piloto para la implementación de la Evaluación Clínica Objetiva y Estructurada (ECOE) como prueba final del Grado en Farmacia.

Esta prueba se desarrolla en el Área de Simulación Clínica del edificio Concepción Aleixandre y, en la misma, participan 72 estudiantes de quinto curso. Este proyecto está impulsado por el decano de la Facultad de Farmacia de la UMH, Jorge Manzanares Robles, y coordinado por la profesora del Área de Farmacia y Tecnología Farmacéutica Elsa López Pintor y el profesor del del Área de Farmacología Francisco Navarrete Rueda y culmina su fase de diseño validación y mejoras tras dos ediciones previas. Su organización ha contado con la implicación de profesorado de diversas áreas de conocimiento, farmacéuticos comunitarios y hospitalarios, actores, evaluadores clínicos externos, así como el apoyo del Servicio de Apoyo Técnico a la Docencia y a la Innovación (SATDI) y del Servicio de Innovación y Planificación Tecnológica (SIPT).

La ECOE permite evaluar competencias clínicas esenciales del Grado en Farmacia, como juicio clínico, el manejo terapéutico, habilidades interprofesionales, la ética profesional y promoción de la salud. Todo ello, se realiza a través de un formato dinámico de rotación por estaciones clínicas simuladas con tiempo limitado. En esta edición, se han perfeccionado elementos clave como la cartelería y ambientación de las estaciones, la formación específica del equipo evaluador y la mejora de las infraestructuras. También, el circuito ha incluido cinco situaciones clínicas representativas de la práctica profesional farmacéutica, relacionadas con dispensación e indicación farmacéutica, cribado, uso seguro de medicamentos e intervención farmacéutica.

Los resultados de las ediciones anteriores reflejan un elevado nivel de satisfacción por parte del estudiantado, con más del 90% valorando la prueba como adecuada u óptima. Entre los aspectos mejor valorados destacan la organización, el realismo de los casos y actuación de los pacientes simulados. Además, las sugerencias recibidas en cada edición han sido integradas progresivamente, lo que ha permitido consolidar una estructura sólida y realista. De este modo, la prueba ECOE se consolida como una herramienta clave para garantizar una formación competencial alineada con las necesidades reales del entorno farmacéutico.

Fuente imagen: UMH.